El nacimiento de la raza canina Kromfohrlander es bastante reciente y está muy bien documentado. Fue una criadora alemana quien la creó en 1945 a partir de un grifón vendeano francés y un fox terrier alemán. Se llamaba Ilse Scheifenbaum y vivía en la región de Siegen, en Renania del Norte-Westfalia. La raza tomó su nombre del cercano distrito de Krom Fohr, que en alemán moderno significa surco sinuoso. De sus antepasados heredó el temperamento y el carácter.
El objetivo del criador era crear una raza de tamaño mediano, leal, dócil y fácil de cuidar; de hecho, en aquella época, al final de la guerra y la posguerra en Alemania, sólo un perro así tenía alguna posibilidad de sobrevivir.
Fue reconocida oficialmente como raza en 1955, y es probablemente la última raza canina creada en Alemania.
Carácter de la raza canina Kromfohrlander
Como ya se ha mencionado, su carácter es muy afectuoso, alegre, dócil e inteligente, muy bueno en la guardia. Es muy fácil de adiestrar porque aprende con mucha facilidad. Tiene un sentido innato de protección hacia las personas a las que quiere, se encariña enseguida y está especialmente indicado para estar con niños y también con otros animales.
Vive tranquilamente en un piso y se adapta muy bien a la vida familiar. Con los extraños es más bien desconfiado y reservado. Le encantan los espacios abiertos y los largos paseos. No es en absoluto un perro de caza, aunque necesita pasar tiempo al aire libre.
No le gusta que le toquen los extraños. En familia, es un perro mimoso al que no le gusta la soledad y no es capaz de pasar demasiado tiempo solo.
Aspecto de la raza de perro Kromfohrlander
El Kromfohrlander es un perro de tamaño mediano. El macho a la cruz mide de 38 a 46 centímetros y pesa entre 11 y 16 kilogramos, la hembra suele pesar un poco menos. Su cuerpo está bien proporcionado y no es en absoluto esbelto, pero no tiene excesiva circunferencia ni desarrollo muscular.
Tiene buen impulso de los cuartos delanteros y buen empuje de los cuartos traseros; su andar es suelto, activo, regular y relajado. La cola es en forma de sable, a veces ligeramente enroscada. En reposo, la cola cuelga hacia abajo con una ligera curva en el extremo. En acción la lleva en forma de hoz sobre el lomo. Es un perro al que le encanta saltar.
La cabeza es redonda y proporcionada, el stop es pronunciado, el hocico es recto y ligeramente afinado al final. La trufa es mediana y abierta, de color negro o marrón. Los ojos son grandes y ovalados, oblicuos y muy separados, de color marrón en diferentes tonos.
Existen dos variedades de esta raza debido a su pelaje: de pelo áspero y de pelo liso. El estándar y el tamaño son los mismos. Los ejemplares de pelo áspero tienen una textura gruesa y áspera con el característico rastrojo.
El pelo de la espalda y de las extremidades anteriores y posteriores es más duro que el de los lados, mientras que es más largo en el hocico. En las orejas, el pelo está en armonía con el pelaje.
Los perros de pelo liso tienen una textura espesa y suave y carecen de barba. En general, el pelo está pegado al cuerpo, pero en las orejas, la parte inferior del cuello y el pecho el pelo es más largo. La cola tiene un buen penacho y hay flecos en la parte posterior de las patas delanteras y en los muslos.
El color del pelaje tiene una base blanca, con manchas que van del marrón claro al marrón fuego, pasando por el marrón muy oscuro. Las manchas pueden variar de tamaño y, si el ejemplar tiene una capa interna marrón, las puntas de los pelos pueden ser negras.
También puede haber manchas en la cabeza. Suele haber una lista blanca en la frente que divide la cabeza simétricamente.
Cuidados y salud del perro de raza Kromfohrlander
Por lo general, esta raza goza de buena salud y rara vez se ve afectada por enfermedades genéticas. Puede ser propenso a formas leves de epilepsia o cataratas en los ojos. Pero es una raza muy robusta y rara vez enferma.
Soporta poco el calor o el frío, siendo una raza que prefiere vivir en interiores.
En cuanto a la dieta, no se recomienda el alimento seco para esta raza, ya que estos perros tienden a beber muy poco y, al comer seco, absorben aún menos líquido.
En cuanto al cuidado del pelaje, hay que dividir a los de pelo liso de los de pelo áspero. Para los de pelo liso, basta con cepillarlo de vez en cuando, un poco más durante la muda, ya que pierde mucho pelo. Este tipo de pelaje cambia de capa dos veces al año.
El perro de pelo áspero requiere más cuidados. Nunca cambian de pelaje, por lo que éste crece y al cabo de unos meses alcanza su longitud definitiva y debe cortarse. El baño de ambos tipos sólo debe hacerse en casos excepcionales. Su pelaje es autolimpiable, es decir, la suciedad cae por sí sola del manto del perro. También se puede simplemente cepillar la suciedad del pelaje del perro.