Los orígenes de la raza canina maltesa no son muy conocidos. Lo que sí se sabe con exactitud es que es un perro muy antiguo y que sus orígenes se sitúan en la cuenca mediterránea. La prueba cierta más antigua de su existencia es una representación en un ánfora griega ateniense, datada en torno al 500 a.C.
También hay diferentes corrientes de pensamiento sobre su nombre, una de las cuales es que no deriva de la isla de Malta, como suele creerse, sino de la palabra semítica «malat», cuyo significado es puerto. Esto se debe a que en la antigüedad estos perros se utilizaban en los puertos, donde cazaban ratas. Otra hipótesis es que procede de la ciudad de Melina, hoy Mdina (fundada por los fenicios en el 700 a.C. en Malta). O también de dos islas: una cerca de Sicilia y otra en Dalmacia, que los romanos llamaban Melita, como Malta, y que hoy se conoce como Meleda.
En la antigua Roma eran muy comunes en las casas de los nobles romanos, y eran adorados por las mujeres por su belleza e inteligencia. El maltés alcanzó la cima de su popularidad durante el reinado de Enrique VIII. en Inglaterra, donde estaba muy extendido. En épocas más recientes, recordamos a Giuseppe Verdi, a la reina Victoria de Inglaterra y a las reinas francesas María Antonieta y Josefina Bonaparte, que eligieron al maltés como perro de compañía.
El Maltés contribuyó a la formación de muchas razas, como el Bichon, el Bolognese, el Bichon a poil frisè, el Bichon havanais, el Coton de Tulear e incluso el Yorkshire Terrier en el siglo XIX.
Carácter de la raza de perro Maltés
El Maltés es el clásico perro de compañía, al que le gusta mucho jugar; es vivaz, lleno de alegría y jovialidad. Es sociable con todo el mundo sin límites, se apega especialmente a su dueño, pero también a todos los miembros de la familia. Alegra su hogar y a su familia con su mera presencia. Además, tiene un carácter fuerte y valiente, y también es leal, dócil, atento y obediente. Es un perro amigo de los niños, con los que muestra una gran paciencia y carácter juguetón.
También es un perro muy alerta, que ladra en presencia de personas que no conoce y que entran en casa. Puede describirse como un excelente perro guardián, que percibe hasta el más mínimo ruido. Por lo tanto, se puede decir que el Maltés es adecuado para todo el mundo, ya sea joven, viejo, atlético o sedentario. Le encanta correr, pero también estar calentito, en el sofá o en la cama. También le encantan los mimos. No soporta la soledad y también se lleva bien con otros animales de la casa.
Su adiestramiento es muy sencillo, por lo que el maltés también es adecuado para quienes no están familiarizados con los perros. Aprende fácilmente ejercicios y hábitos sin olvidarlos. También es un perro muy sensible, por lo que debe evitarse toda severidad excesiva con él. Si se siente agraviado, se ofende. Se tiende a malcriar a este perro, que se ablanda con sus miradas suplicantes, por lo que no se deben hacer excepciones en las prohibiciones, ya que si se hacen una vez, se convierten en eternas.
Apariencia de la raza de perro Maltés
El Maltés es un perro pequeño, el macho a la cruz mide de 21 a 25 centímetros y pesa entre 3 y 4-5 kilogramos, la hembra suele pesar un poco menos. Su constitución es fuerte y robusta, aunque dado su tamaño parece algo frágil. Su porte es noble, orgulloso y muy elegante. Su cuerpo da la impresión de ser estrecho y largo, sus patas son cortas, su cola está enroscada y la lleva sobre la grupa.
La cabeza es proporcionada con un cráneo plano y más bien ancho, el hocico es más corto que el cráneo y está cubierto de pelos largos. Los ojos son redondeados, de expresión vivaz y generalmente de color oscuro. La trufa es negra y las orejas tienen forma de triángulo, pegadas altas y dobladas hacia delante.
Su particularidad es el pelaje. De hecho, el Maltés es famoso por su pelaje blanco y elegante. Su pelaje es sedoso, espeso y muy largo y cubre todo el cuerpo. El color es totalmente blanco, aunque a veces pueden encontrarse ejemplares con tonos marfil. Mantener al maltés con un pelaje largo significa que el aseo es exigente. Algunas personas prefieren llevar a su perro esquilado para facilitar el mantenimiento del pelaje.
Cuidados y salud de la raza de perro Maltés
En el caso de este perro, no existen problemas de salud particulares típicos de la raza, pero, como todos los perros pequeños, es propenso a las luxaciones de rótula, para las que la mejor precaución es evitar el sobrepeso y asegurarse de que el perro haga ejercicio con regularidad. Esta raza también está predispuesta a la diabetes y a problemas con los conductos lagrimales. Por eso es importante mantener los ojos libres y limpios, evitando que se irriten al entrar en contacto con el pelo. También está predispuesto a ciertas enfermedades dermatológicas como la dermatitis atópica y las infecciones cutáneas.
Su alimentación debe ser equilibrada y adaptada a su estilo de vida. La esperanza de vida del maltés es bastante alta, ronda los 15-16 años, pero hay muchos individuos que alcanzan fácilmente los 18 años.
El verdadero compromiso, si se decide dejarle el pelaje largo, es precisamente el de cuidarlo. De hecho, hay que cepillarlo todos los días, ya que de lo contrario tiende a enredarse e incluso a anudarse. También hay que programar al menos un par de baños al mes con un champú suave y acondicionador en el segundo lavado.
No soporta en absoluto el frío, por lo que es aconsejable cubrirlo cuando lo saques a la calle en invierno.